-Jefté ofreció un sacrificio humano a Jehová. Mató a su
hija,en sacrificio, sobre el altar del Templo.
Hebreos 11- 32-dice:
"¿Y qué más digo? Porque el tiempo me faltaría contando las hazañas de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté , de David de Samuel y de profetas…”
Jefté figura en la Biblia como el noveno juez de Israel y se destacó no solo por sus hazañas sino también por sus barbaridades.
La Biblia llama jueces a personas que en época de emergencia nacional conducían el pueblo a la guerra y tras libertarlos de la opresión extranjera continuaban dirigiendo los destinos de la nación ejerciendo funciones de gobernante.
Jueces (11-1 al 5) dice: “Era Jefté, un fuerte guerrero hijo de una meretriz y su padre fue Galaad.” Galaad tuvo otros hijos de su legítima esposa. . Galaad trajo a su casa a Jefté a quién quería mucho y a su madre la meretriz que pasó a ser su segunda esposa.
A la muerte de su padre, sus medios hermanos, lo arrojaron de la casa diciendo: “No vas tú a heredar en la casa de nuestro padre pues eres hijo de otra mujer.” Jefté se sintió traicionado por sus hermanos y por su misma madre que nada hizo para retenerlo. Se convirtió en un resentido social. Amargado y lleno de odio salió del territorio de Israel y habitó en tierra deTob. Los habitantes de esta región se dedicaban a la fundición de hierro y a fabricación de armas que eran desconocidas en Israel. ( Los israelitas recién en el tiempo del rey David comenzaron a tener ejército organizado y armas de hierro). Jefté se dedicó al robo y al pillaje a las caravanas que salían de Israel. Según lo que dice el libro de los Jueces 11- 1: “y se convirtió en un fuerte guerrero, experto en el manejo de machetes de hierro."
Viendo la prosperidad de Israel el pueblo vecino de Amón se congregó en la frontera para atacar a Israel con el solo propósito del pillaje a fin de llevarse el ganado y las cosechas.
Viendo el peligro, los ancianos congregaron al pueblo y dijeron: (Jueces10-10) “Hemos pecado contra Jehová adorando otros dioses, y le hemos dado motivo para que nos castigue”.
Como en Israel no había ejército los ancianos mandaron decir a Jefté que viniese a organizar uno.
Había llegado el momento tan esperado por Jefté para vengarse.
De seguro ya tenía preparado todo lo que les diría, y lo menos que les diría era que se arreglaran como pudieran. Sucedió entonces algo inesperado (Jueces 11-29) “El espíritu de Yahvé vino sobre Jefté” Y llegando a sus hermanos sin rencor ni espíritu de venganza dijo: ¿No sois vosotros los que me arrojasteis de la casa de mi padre y ahora que estáis en aprieto venís a mí? Pelearé por vosotros y seré vuestro jefe si hacéis todo lo que os pida.
Y todos respondieron: "Sea y que Yahvé sea testigo que lo haremos."
Lo primero que hizo fue reclamar la herencia de su padre.
Segundo trajo a su esposa y única hija a vivir con él en la que fue la casa de su padre.
Luego mandó a los ancianos congregar a todo el pueblo ante el santuario de Yahvé para orar y pedir perdón por haber adorado a dioses ajenos mandando destruir todos los ídolos falsos.
En todas las tribus eligió jóvenes para la guerra pero la tribu de Efraín no quiso integrarse y se retiro. A fin de ganar tiempo para formar y entrenar su ejército mando mensajeros al rey Amón para que justificara la invasión a Israel. Los mensajeros fueron y vinieron muchas veces con lo cual ganó tiempo para formar su ejército.
Antes de salir a la batalla Jefté reunió a todo su ejercito ante el santuario de Yahvé y en presencia de todos hizo voto a Yahvé diciendo: (Jueces 11-30) “Si entregas al ejercito de Amón en mis manos yo te prometo que a mi regreso victorioso el primero que saliere de mi casa a recibirme te lo ofreceré en holocausto.”
Y arremetió con su ejército y aniquiló al invasor.
Para pagar a sus soldados con el botín de guerra saqueó 20 ciudades más llevándose desde ganado, cosechas, ropas, oro, plata y todo lo que podría servir para pagar sus tropas. Nunca más los amonitas atacaron a Israel. Cargando todo en carretas y arreando el ganado regresaron a Israel.
Jueces 11-34. “Entonces volvió Jefté para su casa y la primera que salió a recibirle fue su hija única; no tenía fuera de ella hijo ni hija.” Y en cuanto él la vio rompió en llanto y dijo: "Le he dado palabra a Jahvé y no puedo volver atrás".
Cumpliendo su voto Jefté llevo su hija al santuario donde fue degollada y quemada en el altar como ofrenda a Yahvé.
Terminó haciendo lo mismo que hacían las naciones vecinas que ofrecían sacrificios humanos a sus ídolos.
Viendo la tribu de Efraín el enorme botín de guerra que habían traído se presentó a reclamar su parte. Indignado Jefté les dijo:
“les pedí ayuda y no me la dieron, arriesgué mi vida y la de mis soldados, no tendréis ahora parte en el botín”
Jueces 12-1. Dijeron los de Efraín: “volveremos y quemaremos tu casa contigo” Esta respuesta enfureció a Jefté .
Entonces Jefté reunió a su ejército entró en territorio de Efraín y con sus poderosos y afilados machetes de hierro y degollaron a 42mil varones y se retiraron sin saquear nada.
Y Jefté gobernó en Israel 6 años y murió y fue sepultado junto a su padre.
El apóstol Pablo en Hebreos 11-32. dice:"y que más digo, porque me falta tiempo para contar las hazañas de Gedeón, de Barac, de Sansón, de Jefté, que por fe conquistaron reinos e hicieron justicia".
No podemos decir que Jefté hizo justicia al degollar 42mil varones de su propio pueblo, y nos parece exagerado que matara a 42mil, pero de todos modos no deja de ser Jefté, lo que hoy día llamaríamos de genocida pues quiso aniquilar a la tribu de Efraín. -------A todo esto dice la Biblia que Jefté fue enviado por Jehová.
En 1 Samuel 12 - 11 se menciona a Jefté como un libertador enviado por Jehová para salvar a su pueblo.
domingo, 11 de mayo de 2008
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